La secuencia del cañón de James Bond es un opening icónico utilizado en todas las entregas cinematográficas de la saga. La secuencia está acreditada a Maurice Binder, un famoso diseñador de títulos que creó los openings de 14 entregas. El punto de vista de la secuencia se logró con una cámara estenopeica rodando a través de un cañón real.
En dicha secuencia, una serie de puntos blancos se desplazan a lo largo de la pantalla de (visto en la perspectiva del espectador) izquierda a derecha. Cuando llega el extremo derecho, el punto cambia a una vista desde el cañón de un arma. Este cañón es visto desde la perspectiva del asesino; apuntando a James Bond mientras camina, que rápidamente se gira y le dispara, volviéndose la pantalla roja (dando a entender que el asesino ha sido disparado y mancha la pantalla con su sangre). Finalmente el cañón se disuelve en un círculo y la película comienza.